La mañana, muy mala para mí. Deseoso que las predicciones meteorológicas se equivocasen, abro la ventana y me encuentro que no, que no se han equivocado y que nos encontramos con una mañana fría, húmeda y lluviosa. ¡Que se le va a hacer!.
Durante el calentamiento las sensaciones son buenas. Las piernas van sueltas, que es lo mejor que se puede decir en un calentamiento. Vamos bien, fácil.
A las 10'00 en punto se dá la salida a la prueba. Los dos primeros tercios de carrera son buenísimos, haciendo por debajo de 17'50" los dos primeros 5000. Pero no hay que fiarse. Los otros dos tercios restantes son los peores, en los que hay que apretar de lo lindo.

Del km 13 al 15 marca lo que quizá sea lo peor del recorrido y la carrera. El paso por kilómetro baja de 3'30" a 3'40" aproximadamente. Por el 15, un compañero de equipo me hace de liebre durante 3 kms y gracias a eso volvemos a estar en tiempos, 3'35" el 16, 3'29" el 17 y 3'31" el 18. Ya solo quedan tres kilómetros para acabar. El paso por el 19 lo hago en 3'34", pero me desfondo un poco en el 20, y me voy a 3'47". Algo tocado físicamente, intento bajar como sea el último kilómetro, cambiar el ritmo y hacerlo como si fuese una serie. Lo hago, pero no bajo lo suficiente, 3'40". Un último y rápido sprint de línea de meta deja la marca en 1h16m34s, lo que supone mi mejor marca en media maratón y una rebaja de nada menos que 2m 15s al circuito de Elche.

Me hubiese gustado bajar de 1h16m, pero no se puede pedir más. Quizá en otro circuito como Benidorm u Orihuela, hubiera sido posible... Pero... en fin... el año que viene será.
Ahora toca un pequeño parón, recuperar fuerzas y A POR LAS CARRERAS DE VERANO!!!!!.
