

He terminado bastante satisfecho de éste ciclo veraniego, ya que, y después del parón de más de mes y medio por culpa d ela operación, he podido conseguir los objetivos que me había marcado. Primero volver a mi nivel, después ser rápido en distancias cortas y por último, intentar subir al podium en varias carreras. Eso, y a falta de lo que pase en siete aguas (hay que ser realista y saber que bajar de 58'42" es muy complicado), ha sido el resultado satisfactorio de todo éste ciclo. Ahora, un merecido relax (que no descanso) y a preparar Benidorm y Barcelona o Valencia.
La noche anterior a la carrera fue desastrosa. No dormí lo que debería, despertándome cada dos por tres, y, claro, eso al día siguiente se noto. Era un circuito ideal, ya que lo más duro de otros años lo habían suprimido, con lo que se podia correr... y bien. Pero cuando uno no va, no va. Ya desde el primer kilómetro me ví que las piernas no tiraba. Empezaba a sufrir más de lo necesario. Por el kilómetro 10 todavía iba en tiempo de batir mi marca, pero a raíz del paso por mitad de carrera el sufrimiento se convirtió en inhumano, hasta el punto de pensar en la retirada. Pero no fue así, supe padecer y, no batí mi marca, pude defender mi honra con una marca de 1h 16m 59s.
Con la moral completamente por los suelos, y prácticamente sin tiempo para la reflexión, comenzaba la preparación de un nuevo objetivo, la Maratón de Sevilla. Era el otro gran objetivo que me había marcado en la temporada. Bajar de las 2h40m no era moco de pavo, sobre todo viendo lo que había sufrido y machacado para hacer 2h42 en Barcelona.
Gracias a los ánimos del mister empecé a preparar la cita. Tenía por delante días muy duros, días de series largas e interminables. Siempre tendré en la memoria ese gran 2x8000 con todas las montañas de Alicante al fondo completamente nevadas y con 4 grados en el termómetro. Al igual que siempre se me quedará en la mente uno de los entrenos más extremadamente duros que he realizado en mi vida, concretamente 20 kilómetros de series que me dejaron completamente desfondado y hundido.
Pero raíz de ahí, empezamos a coger forma, empezamos a rodar de lujo y vinieron los frutos, a saber:
10k de Valencia
Esa semana entrené como nunca y me noté con muy buenas sensaciones, pero jamás pensé que iba a romper la barrera de 35 minutos, barrera que me ha costado Dios y ayuda romper. Pues con apenas 2 grados en salida del paseo de la Alameda de Valencia, me disponía a darlo todo, en unos 10k muy rápidos. Iban pasando los kilómetros y los tiempos salían. 34'50", y por primera vez rompo la barrera de loos 35' en un 10k. Lo había realizado un par de veces, en dos 10k no homologados, 34'30 en catral y 34'25" en El Verger.
1/2 Maratón Internacional Santa Pola
Santa Pola me supuso la típica media maratón que sirve como test previo a la maratón. Pero ni en mi mejor de los sueños pensaba que me iba a salir tan bien. La idea de hacerla en progresión, de menos a más. Pero ni por esas. Lo que no salió en Benidorm, salió prácticamente sin pensarlo en Santa. Ví que la cosa iba a salir cuando iba marcando parciales por debajo de 3'30 y sólo se me empezaron a ir a partir del km. 15. Al final 1h15m15s a 3'34" de media. Para mí algo increíble y completamente inesperado. De paso, también me "cargué" mi mejor marca en 15k, que la tenía en Massamagrell, dejándola en 53'29".
El domingo14 de febrero era la cita. Una nueva edición de la MARATÓN INTERNACIONAL DE SEVILLA. Carrera que poco a poco ha ido creciendo hasta convertirse, según el último informe de la RFEA, en la mejor maratón que se disputa en España.Gran nivel en la salida del estadio Olímpico de la Isla de la Cartuja, con muchos atletas africanos y muchos y buenos atletas españoles con intención de conseguir la marca mínima para el próximo europeo de Barcelona.
En la salida del estadio olímpico, y junto a más de 4000 entusiastas maratonianos, ahí estaba yo con la intención de rebajar la marca cosechada en Barcelona hace un par de años, para lo cual había entrenado de lo lindo.
La carrera fué perfecta para mí, prácticamente desde la primera zancada en positivo. Quizá algo de fresco, 5º durante toda la carrera. Las primeras sensaciones no eran muy buenas. Los dos primeros kilómetros iba con el pulso excesivamente alto para el ritmo que llevaba. Afortunadamente, en esos instantes, tuve cabeza y no me dejé llevar por el entusiasmo... Fué a partir del Km 5 cuando el pulso se me estabilizó y empecé a correr al ritmo que tenía previamente marcado....
El paso por la primera media maratón lo realicé con un tiempo de 1h21m11s, quizá algo lento, pero yo no tenía esa idea, ya que el pulso controlado iba a ser el que marcaría la diferencia al final. Y así, que cerré mi participación con un extraordinario y extratosférico segundo parcial de 1h18m09s. Conforme iban pasaban los kilómetros me iba encontrando cada vez mejor, iba pasando a atletas y marcaba tiempos de 3'36"-3'40" por kilómetro. Fué en el km 41 cuando me dí cuenta que mi objetivo se iba a hacer realidad. Afortunadamente, no sólo no bajé el ritmo, sino que lo pude incrementar, terminando en el estadio olímpico con un apoteósico 200 en 36s. Mi marca 2h 39m 20s.
Agradecer al mister el trabajo que ha realizado y la confianza que ha depositado en mí para conseguir ésta marca.
También agradecer a mis compañeros de viaje, Jorge y Patón, por el extraodinario ambiente que tuvimos durante todo el fin de semana. Con ambiente así, de alegría, optimismo y buen rollo, es muchísimo más fácil correr.